El ascenso meteórico de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba continúa. La banda sevillana ha escalado desde el valle de sus inicios hasta la cima del panorama nacional, convirtiéndose en uno de los conjuntos más prometedores de nuestra música. Han encandilado a cada uno de los oyentes que los han escuchado convirtiendo en seguidores a todo aquel que se cruzaba con sus canciones. No han necesitado nada más allá que su trabajo, su talento, su ingenio y su fervor por la música de su tierra. Tras el deslumbrante debut homónimo, y alguna versión de Camarón mediante, Hilo Negro (Primavera Labels, 2021) es la confirmación de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba.
El rotundo comienzo de Hilo Negro con la batería de «El Valle» ya es toda una declaración de intenciones. En este segundo álbum, Derby Motoreta’s Burrito Kachimba logran un sonido más compacto, en argot pugilístico, tienen la pegada de un peso pesado. Esto pasa por un bajo más saturado y protagonista en la mezcla que amalgama y fortifica en cada nota las melodías frigias de las guitarras con cada golpe de baqueta de la batería. En temas como «Porselana Teeth», además, el dotado vocalista Dandy Piranha, muestra nuevos registros, en una tesitura más grave y reposada, donde brilla como de costumbre, produciendo un aroma añejo embriagador.
Canciones como «13 Monos» o «RGTQ» demuestran ese endurecimiento del sonido de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba, como una especie de versión cañí de los temas más hard rock de los últimos trabajos de Foo Fighters. Siendo objetivos, con mejor resultado, a diferencia de los de Dave Grohl, con la inquietud de desarrollar las composiciones desde la experimentación y la creatividad como en la segunda mitad de «RGTQ». Y si de experimentación se trata, como ya hicieran en su primer disco, los sevillanos dedican a la investigación sonora un corte alejado de la estructura de canción: «Somnium Igni – Pt. 2».
Probablemente, teniendo en cuenta los mimbres que han demostrado en sus dos primeros trabajos, en el futuro, se podría esperar de Derby Motoreta’s temas más extensos, de mayor desarrollo, en pos de su evolución. El primer paso en esa dirección es «Gitana», la composición más completa y soberbia de los sevillanos hasta la fecha. En la música, cada pequeño detalle marca la diferencia, y en Hilo Negro no hay nada dejado al azar. En la arábiga «Turbocamello», los incesantes redobles de percusión timbales en segundo plano, y las guitarras andalusíes escarban en las conexiones musicales mediterráneas.
«Caño Cojo», «DÁMELA» y «La Cueva» son la traca final del Hilo Negro de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba, con ritmos frenéticos que constatan su acercamiento a un sonido más recio, incluso metalero. De hecho, «La Cueva» es una suerte de mezcla entre algunos de los temas más oscuros de Jesucristo Superstar y Black Sabbath. Hilo Negro es un triunfo pletórico de la kinkidelia de Derby Motoreta’s, su mundo estético y el rock andaluz. Demuestran ser una banda de categoría internacional, quizá (ya que estos días están tan en boga) los Héroes del Silencio de esta generación, una banda con estilo propio, un cantante extraordinario, y una personalidad musical arrolladora.